Aunque el club de baloncesto riojano Baby Basket Rioja que conocéis hoy en día es relativamente joven, tenemos que remontarnos unos cuantos años para encontrar la semilla de la que surgió.
Tardes en el patio del colegio
Corría el año 1984 y, en el patio del Colegio Compañía de María de Logroño, entre actividades deportivas, cucarachas en los vestuarios y canastas que se movían solas, surgía la amistad de un grupo de personas apasionadas por el deporte.
La necesidad de dar salida a los equipos de baloncesto y voleibol que se habían formado en ese Colegio llevó a estas amigas y amigos a fundar la Agrupación Polideportiva Lestonnac.
Durante los siguientes años, el Lestonnac fue casa de numerosos equipos de baloncesto y voleibol que participaban en competiciones regionales y nacionales.
Aunque contaba con categoría masculina, el Lestonnac siempre fue un club mayoritariamente femenino, y es en uno de esos equipos femeninos donde jugó Carlota Castrejana.
Carlota Castrejana: un nombre que no olvidamos
Desde esas tardes de baloncesto en el patio del Colegio Carlota destacó. Y no dejó de hacerlo, porque con 14 años fue seleccionada para formar parte de la Operación Siglo XXI en Manresa, un proyecto nacional para potenciar el talento deportivo desde categorías escolares.
Más tarde Carlota fue olímpica en Barcelona 1992 con la selección de baloncesto, obteniendo el quinto puesto. Su palmarés se alarga aún más, aunque esta vez en la disciplina de triple salto, en la que también ha acumulado diversos logros. Una vez retirada del deporte profesional, fue Directora General de Deportes de la Comunidad Autónoma de Madrid.
Tenemos la suerte y el orgullo de que Carlota nunca ha olvidado sus orígenes ni a su gente. Nosotras y nosotros tampoco la hemos olvidado a ella.
Unos años más tarde…
Ahora demos un salto temporal de nueve años y lleguemos a 1995… El Lestonnac se queda atrás y varios miembros salientes deciden constituir una Asociación de Tiempo Libre llamada Baby Basket Rioja con el fin principal de potenciar el deporte base sin olvidar las categorías superiores.
En 1999 sin embargo se llega a un acuerdo con el C.B. Lardero para cederle los derechos federativos, es decir, para fusionar ambos clubs en el denominado Lardero Basket Rioja y beneficiar a los equipos nacionales femeninos.
Eso sí, el BBR no llega a desaparecer nunca como entidad, pero se queda seis años descansando para volver a las pistas y, concretamente, al patio del C.E.I.P Duquesa de la Victoria en la temporada 2007-2008.
El BBR no quería que este Colegio se quedase sin baloncesto, así que retomamos con muchas ganas el proyecto y, además, sacamos también nuestro primer equipo de categoría infantil, formado por las alumnas del Duquesa que pasaban al I.E.S. Sagasta ese mismo año.
En la temporada 2008-2009 dos nuevos equipos, uno masculino y otro femenino, dan también el salto a canastas grandes. A día de hoy, podemos decir que de esa primera generación del BBR, varias jugadoras y jugadores han formado parte de las selecciones regionales.
Siguen pasando los años y en el BBR estamos felices de ver cómo nuestra querida cantera sigue creciendo, desde la escuela hasta categoría junior, y con ella el número de entrenadoras y entrenadores que transmiten los valores del club desde el banquillo.
Uno de nuestros mayores orgullos es saber que gran parte del equipo técnico del BBR jugó antes en el club y ha continuado, ahora desde el otro lado, ligada a nuestra historia.
Mucho más baloncesto
Además de participar en los Juegos Deportivos de La Rioja y en la Competición Federada Junior provincial, colaboramos en las actividades organizadas por la Federación Riojana de Baloncesto y hemos ido celebrando concentraciones con equipos de Nájera, Calahorra, Pamplona, Haro, Vitoria, Zaragoza e incluso Extremadura.
También hemos formado parte del Campeonato Alevín e Infantil de Jesuitas de Logroño y hemos organizado los Torneos de la Amistad junto a los clubs Las Gaunas (ahora Promete) y San Ignacio.
No podemos olvidar los momentos compartidos con los amigos del CRMF de Lardero, que nos han enseñado cómo es jugar a baloncesto en silla de ruedas, y también los momentos vividos en los torneos de fin de temporada, en los que pasamos unos días de mucho baloncesto y mucha convivencia.
El esfuerzo, la evolución y la emoción de la familia del BBR es nuestro mayor premio, pero también fue un bonito reconocimiento el que recibimos por parte del Ayuntamiento de Logroño, a través de Logroño Deporte, al terminar la temporada 2016-2017. Estas entidades nos otorgaron un premio por nuestra labor en el Deporte Base, valorando “el esfuerzo, trabajo y dedicación por la promoción y divulgación del deporte entre los más jóvenes.”
Baby Basket Rioja ha crecido rompiendo las previsiones, y seguirá haciéndolo con la ayuda y la ilusión de todas las personas que forman este gran equipo.